- La decisión del cierre de las sedes de Banco de Chile responde a los procesos de digitalización de la entidad bancaria y se establecerán mecanismo para minimizar el impacto en los trabajadores.
Como parte del proceso de transformación digital dentro de las entidades bancarias del país, el grupo Luksic, que tiene participación en el Banco de Chile, ha tomado la decisión de cerrar varias de las sucursales de éste, como consecuencia de la automatización de sus servicios.
Un total de 33 sedes del Banco de Chile, miembros de la división de CrediChile, serán las que cerrarán sus puertas a partir de las próximas semanas y por un lapso estimado en lo que queda del año 2019.
Se estima que este proceso hará que el Banco de Chile haga un desembolso de unos 72 mil millones de pesos, de los cuales más de 50 mil millones se emplearán en tecnologías de la información, mientras que lo restante se usará para infraestructura.
La decisión del cierre de estas entidades fue notificada formalmente a los sindicatos por parte de los altos gerentes. Esto ha conllevado a la reincorporación del personal en otras divisiones, así como la implementación de planes de retiro.
El objetivo que se ha planteado la empresa al respecto es reducir el impacto que la automatización provocará en los puestos de trabajo, tomando en consideración que se instalarán máquinas de autoservicio con múltiples funciones que anteriormente realizaba un funcionario de atención al cliente.
Por supuesto, los procesos de solicitud de créditos y otros productos más personalizados seguirán siendo realizados por los ejecutivos que trabajan en esa entidad financiera, pues no son trámites que puedan llevarse a cabo desde una máquina por la importancia que poseen.