El año 2017, escribí una columna sobre el efecto que estaba teniendo el cambio de la forma de consumir en Estados Unidos, y cómo esto estaba afectando a los negocios tradicionales.
Hace unos pocos días el reporte de Bespoke Investment Group reveló que el comercio “no tiendas” representó en el segundo mes del año 11,813% de todas las ventas en Estados Unidos, mientras que el “comercio general” aportó con 11,807%.
En palabras simples, por primera vez, las ventas en línea fueron levemente mayores a las ventas tradicionales, lo que es un cambio histórico y muestra cómo es el nuevo consumidor; ahora digital.
El gráfico muestra, como desde el año 2009, termina el alza en el consumo del comercio tradicional y cómo desde los 90, el consumo en línea ha aumentado en forma sostenida.
Para mi, como experto en economía digital, lo importante de estas cifras, no es que al fin ambos tipos de consumos ya estén en la misma magnitud. Lo que me sorprende es la implicancia que esto tiene y los desafíos que deberemos afrontar en los próximos años, por no decir meses.
Lo primero que nos debe llamar la atención es que hace dos meses, se publicó la siguiente noticia: “Un 17% de rentabilidad en lo que va del año, para la acción de Parque Arauco, sobre todo luego de la venta por U$ 100 MM de su formato de centros comerciales regionales”, a su vez Mall Plaza sigue creciendo y uno se pregunta, ¿si el consumidor en Chile aún es conservador? y ¿las tiendas no tienen nada que temer?. Aquí mi respuesta:
El gráfico muestra cómo desde el 2017, la curva se hace casi exponencial!!! Yo creo que las tendencias que vemos en Estados Unidos, siempre se repiten atrasadas en nuestro país y creo que el consumidor chileno ya cambió. Las nuevas generaciones se relacionan totalmente distinto con las marcas que generaciones mayores de 40 años.
Empresas como Falabella y Cencosud, están trabajando activamente en su transformación digital y han tenido éxito en estos procesos, pero ¿qué pasa con el resto?, ¿qué pasa con empresas de menor tamaño?, ¿están trabajando activamente en digitalizarse y tener expertos en esta área? ¿lo mismo pregunto para empresas medianas y pequeñas?.
Si usted esta leyendo esto, piense lo siguiente; si su empresa o el lugar en que trabaja, ¿está realmente preparado para el nuevo consumidor digital?. Lo invito a reflexionar en la forma en que está desarrollando su estrategia comercial, no importa si está enfocado a personas (b2c) o a empresas (b2b), el cambio viene para todos y viene más rápido de lo que esperamos.