- Un adolescente de 17 años le estalló un cigarrillo electrónico en la boca, mientras fumaba y tuvo que reconstruírsele la mandíbula.
En el Hospital de Utah fue atendido un joven proveniente del estado de Nevada en Estados Unidos. Él llegó con su madre, quien recorrió 400 kilómetros para que recibiera tratamiento por el agujero creado en su mandíbula. Los especialistas informaron que debían reconstruir la zona afectada.
El procedimiento duró 6 semanas y tuvo que aplicarse implantes de dientes para sustituir los que estuvieran rotos. La doctora Katie Russell encargada en traumatología del Primary Children’s Hospital señala que una de las desventajas de los vaporizadores es que explotan en la cara o en los bolsillos.
De acuerdo a estudios médicos realizados en el 2018, revelan que más de dos mil explosiones de este tipo de cigarrillos se han registrado entre el 2015 -2017. La mayor parte de las quemaduras de los pacientes atendidos en emergencias en EE.UU, durante ese lapso de tiempo son por este caso.
Los galenos informan que mucha gente desconoce lo grave que puede ser este tipo de accidentes. Russell puntualizó que su primer paciente en este tipo de caso pudo curarse por completo, pero hay otros que son menos afortunados y hasta pueden perder la vida.
Otros heridos por explosiones de vaporizadores
En Texas un hombre falleció después que le detonara un cigarrillo electrónico, se le reventara la arteria carótida, cuando quedó incrustado en su garganta, así lo mencionaron sus familiares.
En Florida otro individuo murió por usar este aparato al generar un proyectil hacia su cabeza. En ambos casos se determinó que la falla de los vaporizadores era mecánica y requerían de baterías con mayor potencia.
Son muchos los eventos que ocurren al manipularlos. Además, este tipo de lesiones se ha incrementado casi en 40% en estudiantes así lo demuestran estudios médicos publicados el año pasado.