- Se trata de ocho terrenos de un elevado valor que funcionarios del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) traspasaron a familiares y amigos, y que ahora se encuentra bajo investigación del Ministerio Público
Es un enorme fraude que podría llegar a los 500 millones de pesos. Utilizando las facultades que otorga la Ley para despojar la propiedad de un inmueble a un privado, funcionarios del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) de la región de Valparaíso fabricaron documentación ficticia para fingir que familiares y amigos eran los dueños legítimos.
El hecho se descubrió en 2017, cuando representantes del Serviu llevaban a cabo gestiones para la legalización de terrenos, y quien efectuaba el procedimiento administrativo encontró una carpeta con escrituras que indicaban el otorgamiento a particulares de ocho parcelas del loteo irregular “Aurelio Catalán” de Algarrobo.
De acuerdo con un extenso reportaje de Bío Bío, eran parcelas ubicadas en lugares privilegiados. A medio kilómetro de la playa y a metros de la vía hacia el condominio San Alfonso del Mar, un área de alta plusvalía con un valor por encima de los 481 millones de pesos.
La revisión fue avanzando y fue así como se descubrió que ningún beneficiario había demostrado ser heredero de ninguna persona o ente que hubiera participado del proceso, y que además algunos de los favorecidos ya habían muerto cuando les fueron asignados los terrenos.
Y algo peor: quienes recibieron las tierras eran familiares y amigos de altos funcionarios de la Unidad de Regularización de Loteos Irregulares (URLI) del Serviu porteño.
¿Quiénes fueron los responsables de aprobar y legalizar estas operaciones de manera irregular? Según la investigación, serían los abogados Juan Toro Garrido y Carolina Morales, así como el arquitecto Eduardo Sandoval.
Por el momento este caso ha quedado a cargo del Ministerio Público local y fue asignado a la Unidad Regional Anticorrupción (URAC). Sin embargo, no parce haber avances significativos.
